Grandes sorpresas en los dieciseisavos de la liga
La aparente tranquilidad que presidió la fase de treintaidosavos se ha roto esta semana, con la eliminación de dos serios cabezas de serie ‒el ganador del año pasado, Casa Pascualillo, y Entresabores, habitual finalista‒ por un debutante, El Coloquio, que viene pisando fuerte junto a su potente afición de la margen izquierda, y La Bocca, que ha fichado varios cracks esta temporada con el objetivo de ganar la liga.
Y aunque en ocasiones los marcadores puedan parecer abultados, lo cierto es que según informan los árbitros en sus actas, los resultados no pueden estar más igualados. Incluso un par de árbitras llegaron a tener conflictos morales a la hora de decidirse entre El Cabuchico y el debutante Atípico, donde finalmente se impuso la veteranía del primero frente a la juventud del segundo.
Hemos tenido que recurrir al VAR
En dicho grupo, uno de los más duros, hubo de recurrirse al VAR ‒los árbitros especializados, que habitualmente no pisan el campo‒ para dirimir el empate, la prórroga y los penaltis. Finalmente la tecnología decidió que continúe +Albarracín, que nunca había llegado tan lejos en las cuatro ediciones del concurso. Su digno oponente, La Viña, también ha superado de largo el registro de la pasada temporada.
Entro grupo potente, el C, se enfrentaron dos de las tortillas más singulares del concurso, la de La Ternasca, a la brasa, con la de Verdechulo, servida de forma individual en la propia sartén en la que se elabora al momento. Finalmente, los árbitros se decantaron por la segunda.
Sorpresas en esta fase, especialmente entre los debutantes. Dos tortillas memorables, la que supone la ascensión de El Olivo, que se impuso, con más dificultad de la que refleja el resultado, a un clásico como Coso 95. Se enfrentará con otro novato, El Coloquio, en un duelo que se presume inolvidable.
La Luna, con una cómoda trayectoria en esta temporada, juega contra otro debutante Morrete, que también ha llegado a octavos con facilidad. Uno de los dos tendrá que poner los huevos, y la patata, sobre la mesa, para continuar.
Con prórroga y penaltis se impuso otro debutante, La Caleta, a uno de los firmes candidatos a finalista, sorpresa de esta edición, Zeppelin. Le espera, tranquilo, la veteranía de Plaza Goya, con dos estilos de juego radicalmente diferentes, además de sedes bien lejanas, el centro por las Delicias de La Caleta.
Los octavos van a estar muy disputados
Menos distancia física, aunque sí en estilo de juego separa al clásico Hernán Cortés, que se enfrenta al Crac restaurante. ¿Se impondrá la veteranía del primero o pasará de ronda la osadía de la juventud?
La Cafetería Servet, también con un tranquilo recorrido, jugará contra Buena Cara, que todos los años fue eliminado a la primera por un equipo que llegó a la final ‒ también es mala suerte‒, pero que tras otro disputado partido, repleto de empates, prórroga, penaltis y, lo más importante, muchísima deportividad, se impuso a La Cafetería, llegando por primera vez a octavos.
Y nuevo enfrentamiento centro-periferia, con el partido entre El Elegante ‒que superó al debutante y sorpresa del 18, Bar Chalibes, haciendo honor a su nombre‒ y la Cafetería Santa Fé, entusiasta jugador de Torrero que mejora su tortilla semana tras semana, habiendo siendo eliminado siempre por un finalista.
La afición hace grande a los equipos
Es sorprendente el seguimiento de la afición en esta cuarta edición de La Liga de la Tortilla. A pesar de haber quedado atrás grandes equipos, la afición crece a cada ronda, votando y afinando los cinco sentidos para degustar todas las tortillas que sean necesarias para encontrar la mejor tortilla de patata de Zaragoza. Esperamos todos vuestros comentarios en nuestras redes sociales.